La sobrepesca supone una gran amenaza para la biodiversidad marina y el equilibrio ecológico. Los datos son preocupantes. Según la FAO, más del 80% de las reservas de peces de las que existen datos están explotadas al máximo. Otra cifra más que aporta Greenpeace: la abundancia de las poblaciones de grandes predadores como el bacalao, el atún y el pez espada ha disminuido un 90% por culpa de la sobrepesca. Si seguimos pescando al ritmo actual, los científicos estiman que en 2048 habrá desaparecido cualquier pez en el mar.Nuestros mares son vulnerables y sensibles y un cambio importante y repentino del número de ejemplares de una especie puede ejercer una gran presión en su medio ecológico y un cambio en el equilibrio de los océanos, e incluso en la cadena alimentaria de otras especies. La pesca ilegal o pesca de arrastre son dos grandes problemas que aumentan la sobre explotación del mundo marino. En el último caso, hablamos de una técnica de pesca insostenible muy destructiva: las grandes redes de estos buques arrastran el fondo oceánico destrozando y atrapando todo a su paso. De lo capturado, entre el 30% y el 60% corresponde a especies que se han pescado de forma accidental. Todo se tira por la borda.
No hay comentarios:
Publicar un comentario